Este bálsamo protege, calma y cuida las encías de su bebé.
Se recomienda aplicar una pequeña cantidad de gel bálsamo (tamaño de un guisante) sobre un dedal de silicona adaptado a las delicadas encías del bebé, sobre la yema del dedo limpio, o sobre una gasa y realizar un suave masaje sobre la encía enrojecida del bebé.
Puede usarse a demanda, según la necesidad, hasta un máximo de 6 veces al día; antes de las comidas y antes de acostar al bebé para favorecer las comidas o el sueño.